La pandemia de la enfermedad por coronavirus (COVID-19) ha expuesto y/o agravado cualquier problema preexistente en todo el mundo. También para los evaluadores, ya que desde marzo de 2020 nos planteamos preguntas adicionales sobre cómo garantizar que las evaluaciones sean útiles para sus destinatarios. Impulsadas por la necesidad de seguir contribuyendo al aprendizaje y la rendición de cuentas, las evaluaciones han adoptado también nuevas formas de trabajo, y se han convertido —en gran medida— en una práctica virtual. ¿Sabemos cómo ha afectado esto a la utilidad de nuestro trabajo? Si bien...
My contributions
Evaluation questions the value of aid interventions. We need to keep warranting the value of evaluation.