Muchas gracias por plantear esta discusión y todas las contribuciones. Muy interesante.
Aumentar la influencia de las evidencias en la toma de decisiones es un desafío prolongado para quienes trabajamos en el ámbito del seguimiento o la evaluación, relacionado con una serie de factores en todos los niveles de nuestras organizaciones, incluso cuando la importancia de las evidencias se reconoce ampliamente.
En el Departamento de Evaluación del Programa Mundial de Alimentos (PMA) hemos aplicado estrategias específicas para alentar a nuestras partes interesadas a utilizar evidencias en la adopción de decisiones. Tras varios años de experiencia, puedo compartir algunas reflexiones sobre lo que consideramos eficaz.
Sin duda, estoy de acuerdo con gran parte de las observaciones formuladas en relación con los factores que impiden integrar las evidencias en la toma de decisiones. Entre otros, la calidad deficiente de los datos; la fragmentación de los sistemas de información; una cultura organizativa que sigue considerando el seguimiento o la evaluación como meros requisitos, en lugar de oportunidades de aprendizaje; o la importancia del personal directivo superior en la promoción.
En cuanto a las opciones para mejorar la integración de las evidencias en la adopción de decisiones, coincido con el punto de vista de Brilliant Nkomo: formalizar los procesos es un primer paso fundamental.Si numerosas organizaciones cuentan con marcos de seguimiento y evaluación claros y elaboran orientaciones y desarrollan capacidades relacionadas, también es importante institucionalizar en cierta forma la incorporación de conocimientos basados en evidencias en cualquier debate sobre políticas o programas, integrándolos formalmente en la planificación estratégica o en procesos periódicos de balance y examen de programas.
En relación con lo anterior, nuestra experiencia ha demostrado que los esfuerzos por sincronizar nuestra generación de evidencias con las necesidades de nuestras partes interesadas merecen la pena: como generadores de evidencias y conocimientos, hemos sido más proactivos colaborando con aquellos cuyas decisiones podemos apoyar, para escuchar las dificultades a las que se enfrentan y saber cuáles son sus carencias. En paralelo, hemos desarrollado la capacidad de responder a las necesidades según van surgiendo, reutilizando las evidencias existentes en nuevos productos. Apreciamos un cambio cultural lento: la evaluación se considera ahora una aliada que proporciona conocimientos.
Por último, cuando pedimos a nuestras partes interesadas que valoraran las evidencias proporcionadas, hemos confirmado nuevamente que la comunicación personalizada también merece la pena: sabemos que existen distintas preferencias en lo que respecta al tipo de evidencias y en cuáles de ellas centrarse. Por lo tanto, cuanto más nos adaptemos a la variedad de necesidades de aquellos a quienes servimos, mejor acogida tendrán nuestros productos y mayor será la probabilidad de que sean utilizados.
RE: How to Ensure Effective Utilization of Feedback and Recommendations from Evaluation Reports in Decision-Making
Italy
Aurelie Larmoyer
Senior Evaluation officer
WFP
Publicado el 22/08/2025
Estimada Mónica, estimados colegas:
Muchas gracias por plantear esta discusión y todas las contribuciones. Muy interesante.
Aumentar la influencia de las evidencias en la toma de decisiones es un desafío prolongado para quienes trabajamos en el ámbito del seguimiento o la evaluación, relacionado con una serie de factores en todos los niveles de nuestras organizaciones, incluso cuando la importancia de las evidencias se reconoce ampliamente.
En el Departamento de Evaluación del Programa Mundial de Alimentos (PMA) hemos aplicado estrategias específicas para alentar a nuestras partes interesadas a utilizar evidencias en la adopción de decisiones. Tras varios años de experiencia, puedo compartir algunas reflexiones sobre lo que consideramos eficaz.
Sin duda, estoy de acuerdo con gran parte de las observaciones formuladas en relación con los factores que impiden integrar las evidencias en la toma de decisiones. Entre otros, la calidad deficiente de los datos; la fragmentación de los sistemas de información; una cultura organizativa que sigue considerando el seguimiento o la evaluación como meros requisitos, en lugar de oportunidades de aprendizaje; o la importancia del personal directivo superior en la promoción.
En cuanto a las opciones para mejorar la integración de las evidencias en la adopción de decisiones, coincido con el punto de vista de Brilliant Nkomo: formalizar los procesos es un primer paso fundamental. Si numerosas organizaciones cuentan con marcos de seguimiento y evaluación claros y elaboran orientaciones y desarrollan capacidades relacionadas, también es importante institucionalizar en cierta forma la incorporación de conocimientos basados en evidencias en cualquier debate sobre políticas o programas, integrándolos formalmente en la planificación estratégica o en procesos periódicos de balance y examen de programas.
En relación con lo anterior, nuestra experiencia ha demostrado que los esfuerzos por sincronizar nuestra generación de evidencias con las necesidades de nuestras partes interesadas merecen la pena: como generadores de evidencias y conocimientos, hemos sido más proactivos colaborando con aquellos cuyas decisiones podemos apoyar, para escuchar las dificultades a las que se enfrentan y saber cuáles son sus carencias. En paralelo, hemos desarrollado la capacidad de responder a las necesidades según van surgiendo, reutilizando las evidencias existentes en nuevos productos. Apreciamos un cambio cultural lento: la evaluación se considera ahora una aliada que proporciona conocimientos.
Por último, cuando pedimos a nuestras partes interesadas que valoraran las evidencias proporcionadas, hemos confirmado nuevamente que la comunicación personalizada también merece la pena: sabemos que existen distintas preferencias en lo que respecta al tipo de evidencias y en cuáles de ellas centrarse. Por lo tanto, cuanto más nos adaptemos a la variedad de necesidades de aquellos a quienes servimos, mejor acogida tendrán nuestros productos y mayor será la probabilidad de que sean utilizados.
Les deseo lo mejor a todos.